lunes, 15 de diciembre de 2008

EPIGRAMAS - II

DEFINICION
A la abeja semejante,

para que cause placer,
el epigrama ha de ser
pequeño, dulce y punzante.
siglo XVIII, Juan de Iriarte


EL APARTADO
He visto en un obrador
a Rita y Paz, dos morenas
que convidan al amor.
Blanca y Sol, dos rubias… buenas,
Luz, trigueña superior
y Ana, de pelo rizado
que es (me lo han asegurado)
una moza de provecho:
Las demás, son desecho
y estas seis… el apartado.
Mariano del Toro y Herrero


LOS CUERNOS
En nuestra plaza de toros
y desde el palco cuarenta,
admiró la cornamenta
de un Miura Juan Amores,
y su esposa (esto es notorio)
le dijo con mucho mimo:
cuernos como esos, mi primo
te ha puesto en el dormitorio.
Anónimo, 1887


EL MARIDO Y EL SEXO
Dije al ver que un toro buido
cejaba al sentirse herido:
-Llega bien, más no remata.
Y por lo bajo la chata
añadió: -¡Así es mi marido!.


QUITES
Disentían con calor
algunas aficionadas,
las suertes más adecuadas
al quite del picador.
Según unas, lo mejor
era un recorte (a su juicio);
y otra que entiende el oficio,
dijo: -El recorte me carga,
y en cambio, una buena larga,
me saca siempre de quicio.


FEOS
Admirando a un matador,
exclamó cierto señor
natural de Valdemoro:
-¡Se necesita valor
para recibir a un toro!
Era el matador aquel,
feo cual otro Luzbel,
y añadió cierta chulita:
- Más valor se necesita
Para recibirlo a él.
Un aficionado.


APLOMADOS
Un Concha y Sierra, boyante,
con tal furia arremetía
cuanto encontraba delante,
que el redondel parecía
nuevo campo de Agramante.
- De estos desconfío yo
(cierta manola exclamó
que se hallaba en un tendido)
¡Así empezó mi marido,
y bien pronto se aplomó!

Un aficionado.

1 comentario:

  1. Hemos encontrado tu Blog, ya lo seguiremos, y lo iremos leyendo. Un saludo de todos
    Raúl

    ResponderEliminar